Es muy frecuente escuchar que la expresión «ciudadanía española por arraigo. Pero, la realidad es que el arraigo es un medio que se puede utilizar en determinados casos para conseguir una autorización de residencia.

Esta autorización de residencia si que puede ser el medio para conseguir la ciudadanía española, es decir, la nacionalidad española por residencia.

No obstante, en este artículo te voy a contar cuáles son los principales tipos de arraigo.

Tipos de arraigo

De manera breve, te voy a explicar cuáles son los 4 tipos de arraigo que existe en España.

• Arraigo familiar: Este tipo de arraigo está especialmente pensado para aquellas personas que tiene un familiar directo con la nacionalidad española, estamos hablando de hijos, cónyuge, padre o madre. Una de sus principales características es que no exige acreditar medios económicos y que autoriza a residir y trabajar en España durante 5 años.
• Arraigo social: Este es el arraigo más conocido ya que en los últimos años se ha empleado en bastantes ocasiones. Su principal característica es que se debe haber permanecido en España durante, al menos, 3 años y que se debe acreditar vínculos familiares o presentar un informe de inserción social. 
• Arraigo laboral: Una de las figuras más empleadas también en los últimos años. Esta se caracteriza por exigir la permanencia en España durante 2 años y demostrar la existencia de relaciones laborales cuya duración no sea inferior a 6 meses.
• Arraigo para la formación: Este es uno de los arraigos menos conocidos, pero puede ser una solución muy interesante. Para acogerte a esta figura debes haber permanecido en España durante, al menos, 2 años y debes comprometerte a realizar una formación para empleos de difícil cobertura.

Como puedes ver existen una gama variada de figuras con las que podrías ganar el tiempo necesario para conseguir la nacionalidad española.

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